- Foto: Policía Nacional.
En un ingenioso pero fallido intento de contrabando, las autoridades colombianas lograron incautar 176 kilos de cocaína diluida en agua de coco.
Dicha operación se llevó a cabo en el puerto de Cartagena, la cual fue posible gracias a la pericia de los inspectores de la Compañía Antinarcóticos de Control Portuario ya una alerta de las autoridades francesas. El cargamento, proveniente de República Dominicana y con destino final en (Algeciras) España, fue interceptado antes de su salida.
«Tras verificar los documentos del contenedor, los investigadores de la Policía Nacional descubrieron que la carga provenía de República Dominicana y traía sello de revisada en ese país. Es decir, solo estaba de tránsito por el puerto de la capital de Bolívar, razón por la cual sería poco probable que la perfilaran y revisaran», precisaron las autoridades en un comunicado.
Los narcotraficantes utilizaron una técnica meticulosa para ocultar la droga. En primer lugar, perforaron uno de los orificios naturales de los cocos y extrajeron su agua.
Después de mezclaron la cocaína con el líquido extraído y lo reintrodujeron en los cocos. Finalmente, sellaron la cavidad con una astilla de madera y pegante, intentando que el fruto pareciera intacto.